Una cerradura magnética o mejor conocida como “cerradura electromagnética” es una de las cerraduras más seguras utilizadas hoy en día tanto en oficinas como en la industria, en la cual siempre es necesario contar con un tipo de control de acceso hacia su personal, clientes y empleados. Este usa el principio del electroimán; mediante electricidad podemos producir energía magnética, a grandes rasgos; mediante la corriente eléctrica suministrada ésta chapa se convierte en un poderoso electroimán, adhiriéndose fuertemente al marco de la puerta al momento en que desee cerrarse la puerta. Por lo que cuando la electricidad pasa la hoja de acero de silicio, la cerradura magnética atraerá la hoja de hierro tan de cerca como para bloquear la puerta. La electricidad se cortará y luego la cerradura se abrirá si el sistema de control de acceso reconoce a una persona.